Para poder transformar una idea de negocio en realidad, es necesario disponer de un instrumento que guíe todo el proceso de creación, arranque y consolidación de la empresa. Es el plan de empresa, imprescindible, además, para conseguir financiación de inversores privados, subvenciones, entidades financieras, etc.
Un plan de empresa se puede elaborar de diversas maneras, pero siempre incluyendo los elementos indispensables, a los cuales habrá que dar mayor o menor énfasis dependiendo del sector o de la actividad de la empresa. No es un documento estático; al contrario, será necesario modificarlo para adaptarlo al devenir de la empresa.
Identificación del proyecto, presentación de la idea y de los promotores
Para comenzar, los primeros datos a incluir son los de identificación del proyecto empresarial: nombre comercial; nombre, apellidos y NIF de los promotores; forma jurídica, fecha prevista de inicio de la actividad y resumen y ámbito de ésta, y localización de la empresa.
Tras los datos de identificación, hay que presentar la idea de negocio de forma genérica, más adelante ya se entrará en detalles. Se trata de explicar brevemente la oportunidad de negocio detectada. En este apartado se incluye: idea de negocio; visión y misión del mismo; justificación del proyecto y un breve resumen de la necesidad que se ha detectado como no cubierta en el mercado.
Posteriormente, es necesario presentar a los promotores: perfil formativo y laboral relacionado con la actividad que se quiere emprender, además de conocimientos en gestión empresarial, económico financieros o habilidades personales relacionadas con el emprendimiento.
Plan de marketing y plan de producción
Lo siguiente es el estudio de mercado y plan de marketing: definición del perfil de mercado, análisis y pronóstico de la demanda, competidores, proveedores y estrategia de comercialización.
Otro apartado es el plan de producción y logística del producto o servicio: analizar y describir los procesos de fabricación, de distribución, de postventa, de atención al cliente, administrativos…
Plan de recursos humanos y el económico - financiero
Para llevar a cabo todo lo anterior es necesario un buen plan de organización de los recursos humanos: organigrama, descripción de los puestos de trabajo, política de contratación y política salarial
Por último, el plan económico – financiero. En él hay que incluir los gastos de constitución, el coste de la inversión inicial, previsión de ventas durante los primeros cinco años, estimación de las inversiones a realizar, análisis de los ingresos y salidas de caja y cuenta de resultados previsible, y el estudio financiero de la rentabilidad y viabilidad del negocio.